43. Caballos. Cueva de Ekain (Gipuzkoa). 44. Bisonte. Cueva de Altamira (Cantabria). 45. Venus “Le Losange”, de Grimaldi (Liguria), de hace 25.000 años. 46. Propulsor trabajado en asta de reno que representa a un caballo saltando. Abrigo de Montastruc (Tarnet-Garonne) de hace 14.000-13.000 años. 47. Cabeza de caballo perforada en hueso hioides de hace 14.000 años. Isturitz (Nafarroa Behera). 48. Bisonte trabajado sobre asta de reno hace 14.000 años. Abrigo de La Madeleine (Dordoña). 49. Uro. Cueva de Lascaux (Dordoña). 50. Hueso de alcatraz grabado hace 12.000 años. Cueva de Torre (Gipuzkoa). © Xabi Otero
De este momento son las primeras manifestaciones artísticas, realizadas sobre diferentes soportes, tanto sobre las paredes de cuevas y abrigos como en pequeños objetos mobiliares. Las primeras se conservan mayoritariamente en la penumbra o en las zonas más oscuras de las cuevas, frecuentemente distantes del área doméstica o de habitación. Este alejamiento u ocultamiento ha llevado a apoyar una visión sagrada de estos lugares, en los que se realizarían prácticas o rituales relacionados con la magia de caza, con el chamanismo, etc.
En cuanto a los segundos, se elaboran a partir de diferentes soportes óseos (asta, hueso o marfil) y de piedra (plaquetas y cantos rodados) de reducido tamaño y por tanto, portátiles.
Estos, unas veces se efectúan sobre piezas de carácter utilitario (azagayas, arpones, bastones de mando...), mientras que otras se realizan sobre objetos que aparentemente no tienen ninguna utilidad práctica de carácter doméstico o cinegético.